V. Concurso de
literatura infantil ciudad de Jaén
2016-2017
(Escrito por Álvaro
Torres Ródenas)
Cada
día, como era habitual, Zerg estaba envuelto en su cama porque no le gustaba
madrugar, tenía que ir al colegio, su madre le repetía una y otra vez que iba a
llegar tarde.
A
Zerg le encantaba ir al colegio, porque le gustaba jugar con sus compañeros a
las antenas encadenadas, era divertido ver como cientos de lucecitas de colores
revoloteaban a su alrededor. Su asignatura favorita era la de cómo montar en
nave, porque su sueño era viajar hacia la Tierra.
Pero
en realidad, lo que más le entusiasmaba era cuando llegaba a casa, porque jugaba
con su robot favorito y podía montarse en la nave de su padre.
Cuando
caía la noche Zerg se preparaba para ver las estrellas, le encantaba ver el
planeta Tierra, donde quería viajar, lo contemplaba durante mucho tiempo y
escribía sus características en una hoja.
Un
día de verano, los padres de Zerg le propusieron viajar hacia la Tierra, él por
supuesto le dijo que sí. ¡ Desde ese día comenzaron los preparativos para
iniciar el viaje rumbo a la Tierra!.
El
30 de Junio de 2016 despegaron hacia el planeta. En el viaje tuvieron algunas
turbulencias, pero al fin llegaron sanos y salvos. Cuando iban a aterrizar
tomaron tierra en un lugar repleto de flores amarillas, rojas y violetas….,
Zerg cogió tres de color violeta y le dio dos a sus padres, él estaba muy
emocionado y contento a la vez.
A
lo lejos vieron a un niño emocionado pero también asustado ¡era de la Tierra!,
él se llamaba Diego, tenía la misma edad que Zerg. Era alto y moreno, estaba
emocionado al contemplar la inmensa nave del padre de Zerg y a la vez asustado
por si le atacaban, pero sus piernas no paraban de correr hacia la nave ¡él no
podía controlarlas!.
Cuando
Diego llegó a la nave. Zerg se quedó sorprendido porque nunca había visto a un
ser humano, Zerg y Diego empezaron a hablar de sus planetas mientras que se
acercaban a la ciudad. Cuando llegaron Zerg estaba asombrado porque nunca antes
había visto aviones, coches, edificios….
Diego
llevó a Zerg a su casa, en ella sus padres tenía miedo por Diego le explicó que
era un amigo que había venido del
planeta Marte. Entonces sus padres se empezaron a calmar. Diego le enseñó qué
era una televisión, un móvil… para qué servía cada cosa ¡Zerg no paraba de
sorprenderse!.
Un
día Diego llevó a Zerg a la escuela, Zerg tenía un poco de vergüenza porque
nunca antes había conocido a tanta gente.
Diego
le propuso a Zerg ir a jugar en la feria con sus amigos. En la feria había un
montón de niños y de niñas que estaban jugando en todas y cada una de las
atracciones que había allí. Zerg y Diego probaron una que se llamaba “El Sapito
Loco”, en ella una máquina no paraba de subir y bajar dando vueltas. Luego se
montaron en otras llamadas “La Barca, Los Coches Locos, El Martillo…” allí se
compraron chucherías y Zerg cogió dos de cada tipo, ¡tardó 30 minutos en
comerse todas las chuches!, luego dijo que estaban deliciosas.
Cuando
llegaron a casa jugaron a la PS4 y se divirtieron muchísimo jugando al Fifa-16…
al terminar la madre de Diego preparó una merienda en la que había unos
pastelitos que Zerg se los tomó con mucho gusto.
Al
caer la noche Zerg ya tenía que irse a su planeta Marte, Zerg estaba triste
porque se lo había pasado muy bien con Diego jugando y hablando. Zerg mientras
se despedía por la ventana de la nave lloraba tanto como Diego, porque había sido
una experiencia única.
Colorín colorado este cuento se ha
acabado….
1 comentario:
Maravillosa conexión de planetas, y más aún, de los seres que los habitan… Buen relato el de Álvaro, un placer…
Me alegra volver a saber de ti, querido amigo… Pensaba que ya no publicabas. Con tu permiso, te enlazo en mis blosgs…
Por aquí andaré ;-)
Bsoss enormes!
http://ginebrablonde.blogspot.com”
http://varietes-ginebra.blogspot.com”
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